Casa-Palacio Conde del Castillo del Tajo
Es el monumento civil más antiguo de Fuente de Piedra. Posiblemente sus cimientos sean del siglo XVI, si bien a lo largo de cuatro centurias ha sufrido múltiples readaptaciones ajustándose a las necesidades socio-económicas de cada momento.
El conjunto se ha visto mermado en su extensión por dos motivos: enajenación parcial del patio situado a oriente, donde se ubicaba un molino de aceite y expropiación de un tercio del frondoso jardín que precede la entrada. Conserva su airoso mirador-torre, símbolo del condado, y su fino balconaje.
Las aguas del pozo de este palacete auxiliaron al vecindario durante las epidemias del siglo XVII-XVIII que diezmaron notablemente la población hasta el punto de hacerlo casi desaparecer.
El edificio hizo la función de Iglesia durante un lustro (1884-1889), albergando los enseres del templo, que amenazaba con derrumbarse por los efectos del terremoto de 1884 y oficiarse la misa en los salones de los bajos de la mansión, hasta la reconstrucción del actual templo parroquial.