Ante las numerosas quejas recibidas de vecinos del municipio por el aumento de defecaciones de perros en las vías públicas, el alcalde, Paco Hidalgo, ha emitido un bando para recordar a los propietarios de perros la existencia de una ordenanza de tenencia de animales y por consiguiente su cumplimiento obligado por parte de todos los vecinos.

En el bando se recoge que los poseedores y/o propietarios de perros son responsables de los mismos y están obligados a recoger y limpiar de la vía pública sus defecaciones. Además, el incumplimiento de esta obligación lleva aparejado un deterioro de la imagen del municipio, molestias para los vecinos y constituye una falta grave, que puede ser sancionada con multas de entre 60 y 300 euros.

Del mismo modo, se han dado ordenes a la Policía Local, bien de oficio o a instancia de parte, para que sancionen a quien incumpla estas normas mínimas de convivencia ciudadana y civismo.

El Alcalde, Paco Hidalgo, hace un llamamiento para que los poseedores y/o propietarios de perros cumplan estas normas mínimas de higiene por el bien del municipio y de los vecinos y tener que evitar tomar medidas más drásticas.